Yo soy de esas personas que en esta vida necesita sentir, ya sea para bien o para mal necesito vivir esas sensaciones. Me encanta cuando me da un escalofrío cuando mi churri me da un beso en la mejilla, o cuando me da una palmada en el cucu enfadarme (pero con una sonrisa escondida y con esa sensación que ello conlleva). Me encanta cuando siento ese valor de la amistad en simplemente una mirada o un acto. Me gusta emocionarme por algo bueno que le pase a a los míos (aunque esa persona no haya hecho lo mismo conmigo). Y aunque a veces intento ponerme una coraza, enfadarme y decir no debería sentirlo, me es imposible. Porque yo cuando siento siento. Eso si, el día que un cable se me cruza con otro y hay cortocircuito, las cosas se acaban para siempre jamás y un día... Que una cosas es joder y otra tirar de los pelos (si, muy yo jajaja). Adoro sentir mil y un sensaciones con mis abuelas (son mi vida y las admiro muy mucho). Soy feliz abrazando y besando a mis hijos y que esa sensación maravillosa de felicidad recorra mi cuerpo. Tengo muy mala ostia y quien me conoce lo sabe y en ese estado salen por mi boca sapos y culebras (para llegar a este estado hace falta mucho, no os vayáis a pensar jjjj) y a los cinco minutos me siento tan culpable que no puedo evitar sentir esa sensación de pedir perdón (pues incluso esta sensación me encanta). Porque somos humanos y necesitamos sentir, respeto a la gente que ni siente ni padece pero para mi eso no vale, yo necesito sentir...
Y esto aplicado al mundo de la moda infantil es igual para mi. Necesito sentir, necesito ver un modelazo y que me entre esa ansia, esa sensación de lo necesito, esa hiperventilación, esa locura de inmediatamente llamar a una de mis tiendas y decir resérvamelo pa cuando llegue. Y siendo sincera hay marcas que antes me provocaban esas sensaciones y ahora ya no, los tiempos cambian, los niños crecen, las modas son distintas... Pero hay una marca que me sigue provocando todas esas sensaciones y mas aun si cabe. Estoy expectante cada temporada para ver cuando salen sus modelos, y cuando salen nunca me defrauda, es mas aun superan mis expectativas y me hacen volverme loca pirula al verlo (aun mas de los que estoy jejeje). Esa marca es Eva Castro, la reina de las coronas chavales...
¡vaya conjuntazo Dior mio!
para mi lo tiene todo todo y todo...
es espectacular, ponible, buena confección...
vamos que lo necesitamos si o si jjjj
Proximamente tendréis coronas por doquier en
Y así nos despedimos... No olvidéis levantar la cabeza, que si no se os cae la corona princesas ;).
Un besazo y feliz miércoles...
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